top of page
  • Antonio Miradas del Alma

Mundos diferentes

Cuando termina la escuela mi profesora cree que voy a casa, pero en casa nunca hay nadie. Las esperas en la calle se me hacen largas hasta que llega mi madre.


Me castigan mucho, mi profesora ya no sabe qué hacer conmigo, ella me dice que siga sus normas, pero sus normas me confunden con las de la calle.


Un día fui expulsado, llegue al límite tolerable, ella hablo con mis padres y esa noche vi a mi padre pegar a mi madre.


Al día siguiente lloré mucho, mi profesora se entristeció al verme, le dije que me sentía despreciable, que solo sabía ia hacer maldades.


Supo de lo sucedido, no era lo que ella creía. En ese momento todo cambio, creo que sabía que hacer conmigo, y yo empecé a quererme.


Desde ese día, ella me mostro sus normas desde otra mirada, más consciente, más creíble. Me dijo que me podían ser útiles también en la calle.


Ahora me comporto mejor en la escuela, sus normas ya no me son extrañas, ni tan distantes. Ahora ya no vivo en mundos diferentes como antes.


Antonio Argüelles. Barcelona


11 visualizaciones
  • Icono social LinkedIn
  • Pinterest
  • Facebook icono social
  • Twitter
  • Instagram
bottom of page