“Comprendo bien lo que me dices, pero no, no puedo ayudarte, tu ya lo entiendes.”
Lo que comprende uno y lo que entiende el otro se da muchas veces por hecho. Es como si el entendimiento del otro formara parte de nuestro sistema de defensa.
Algunas veces la realidad nos supera dejando nuestras emociones al descubierto, sin defensas. Pero tal vez es así como uno puede llegar a entender, abriéndose sus trincheras, poniéndose al descubierto.
Nadie quiere salir herido, nadie quiere sufrir, uno está bien así, decir que comprendes te sitúa lejos aún que lo que dices parezca cercano. Cuando uno quiere comprender se coloca en un abismo dejando atrás su seguridad, su lugar .
La vida nos ofrece oportunidades para situarnos en los abismos de las incertidumbres, es desde ahí, que uno puede llegar a comprender y dejar así su huella en el camino.
“No, no entiendo lo que me dices, ayudame a entenderte porque quiero ayudarte. “
Antonio Argüelles
